Drunkoréxia

Fecha: 06-08-2013 - Categoría: Alimentación

El Instituto de Obesidad alerta sobre los riesgos de esta enfermedad, que mezcla la anorexia y el alcoholismo, remplazando las calorías de la comida por las que aportan las bebidas
La tendencia a dejar de comer durante horas para compensar las calorías ingeridas con las bebidas alcohólicas, o drunkorexia, se está extendiendo, sobre todo, entre las chicas jóvenes, que son las que primero se preocupan por adelgazar.

El asunto es doblemente preocupante en las mujeres ya que el hígado femenino sufre más por el alcohol, aunque ingiera menos cantidad y durante un tiempo más corto que el hombre. Bebiendo la misma cantidad que un varón, la sangre de una mujer absorbe entre un 30 y un 50% más. El corazón es también más vulnerable y con un 60% menos de alcohol puede sufrir la misma cardiopatía.
En casos en los que los padres observen conductas poco frecuentes y raras en sus hijos deberán intervenir un psicólogo —para tratar la adicción, los problemas asociados y la pauta errónea adquirida—, un nutricionista para restaurar el equilibrio nutricional perdido y un médico de cabecera.
Los signos de alarma son:
1.- Un carácter agresivo y poco afable con la familia y el entorno cercano.
2.- No realiza las comidas en familia.
3.- Una bajada de peso importante en poco tiempo y muestra signos de obsesión con el peso.
4.- Presenta deterioro físico, tiene la cara hinchada o piel alterada
5.- Necesita el consumo de alcohol para relajarse, divertirse.